Que los robots han empezado a reemplazar a humanos en ciertos trabajos como la cocina, el cuidado de ancianos, ciertas cirugías es verdad, pero que se hagan cargo de volar y aterrizar una nave tan colosal como lo es un avión Boeing es algo que suena descabellado y con seguridad, haría desembarcarse a muchos. Lo cierto es que la compañía estadounidense Aurora Flight Sciences lo consiguió en una nueva prueba del sistema robótico ALIAS, creado para convertir cualquier avión en un avión no tripulado. En esta ocasión, el brazo robótico logró “aterrizar” un Boeing 737-800NG operado desde una cabina de simulación idéntico al que utilizan los pilotos reales durante su entrenamiento.

El sistema, por muy loco que suene, resultaría siendo útil en todo sentido. La rápida conversión de un avión convencional en un avión no tripulado permitiría solucionar diversos problemas, como la necesidad de drones de gran tamaño o la ejecución de maniobras arriesgadas sin exponer la vida de los pilotos.

En la nueva prueba del Boeing 737-800NG se creó un escenario simulado en donde el piloto principal de la nave resultaba incapacitado de mantener el control. De este modo, el sistema ALIAS, en modo autopiloto, actuó como un segundo piloto: tomó el control del avión, lo condujo al aeropuerto y logró un aterrizaje exitoso.

Fuente: https://nmas1.org/news/2017/05/22/robot-boeing